En la Organización Mundial de la Salud (OMS) después de haberse fumado un habano de Cannabis… algunos expertos empezaron a “volar” sobre este tema…
Antes se sabía que la adolescencia era un periodo que comprendía el ser humano desde los 12 hasta los 19 años…
En cambio ahora, la OMS dio a conocer en un informe que el periodo se extiende 6 años… No, muchachos, NO estamos hablando del periodo de nuestras novias, si no del periodo de la adolescencia…
Según especialistas en el tema:“La adolescencia está ligada a los factores culturales, lo que significa que no se le puede poner una edad limite a la adolescencia, porque la condición de juventud no es uniforme y varia de acuerdo al grupo social que se considere”
Los cambios sociales de esta última década aceleraron esto, ya que más jóvenes de entre 20 y 25 años, aun están de novios, sin trabajos fijos y bien redituables, además de que la mayoría de ellos, no piensa en casarse hasta después de los 30…
“Y lo bien que hacen, todos sabemos que el matrimonio es como una cuenta corriente, de tanto meter y sacar se pierde el interés… jejejeje pero es una opinión mía nada más…”
Mi opinión respecto al tema es la siguiente:Creo que el “no apurarse” en varias cosas, acorta y a la vez alarga ciertas cuestiones ligadas a las responsabilidades del ser humano en esta etapa de la adolescencia.
Es decir, quizás hace 80’ años los jóvenes de 18 años, debían salir a la calle a trabajar, y ganarse el pan, ya que se consideraba que a esa edad ya eran hombre derechos y correctos para afrontar las responsabilidades necesarias que enfrenta al ser, con la existencia elemental de la vida.
Hoy en día, los avances tecnológicos y científicos hacen que la expectativa de vida sea mayor, por lo cual no me extraña que dichos parámetros conceptuales del ser humano, como las etapas de su vida, se vean modificadas.
Psicológicamente la falta de madurez en algunos casos, los apegos excesivos con sus padres y el miedo de estos a que sus hijos despeguen del nido, es un factor clave en la extensión de la adolescencia…
Un símbolo vital y complicado de enfrentar a la hora de que los hijos se van del hogar para los padres, es el envejecimiento, la caída de ciertas responsabilidades y la sobra de tiempo hace que muchas veces sean los mismos progenitores, quienes brinden a sus hijos lo necesario para que estos decidan no irse de la casa familiar.
Otro parámetro vital a mi entender, es la cuestión económica, es indudable que en los tiempos de hoy, marcharse de casa emplea mas que una simple decisión, si no también una responsabilidad administrativa que muchas veces excede las posibilidades de los jóvenes.