12-06-2009 | 13:23
Derviaciones del megaoperativo
Más de seis kilos de marihuana en un local del PJ de Rosario
Once personas permanecen detenidas luego de numerosos allanamientos realizados en el Gran Rosario, en los que la policía encontró “cocinas” productoras de cocaína.
En el marco de los 22 allanamientos realizados en el Gran Rosario que derivaron en la detención de 14 personas sospechadas de producir y vender cocaína, la ex Drogas Peligrosas encontró 6,213 kilos de marihuana dentro de un local vinculado con el Partido Justicialista en calle Juan Manuel de Rosas 4452.
Fuentes vinculadas con la investigación revelaron que allí había tablones, mesas, sillas y todo lo necesario para realizar reuniones de personas. Además encontraron inscripciones partidarias y un amplio cartel que decía Menem 2007. La droga apareció compactada en cinco panes.
Hasta hoy permanecían detenidos por esta causa siete hombres y cuatro mujeres. Tal como informara ayer El Litoral, los operativos policiales se realizaron en Rosario, Alvear y Villa Gobernador Gálvez, y estuvieron a cargo de la Dirección de Control y Prevención de Adicciones de la provincia.
Entre los detenidos, luego de diez meses de investigación, aparece Alejandro Carau Quevedo, quien cuenta con antecedentes por tráfico de drogas en la provincia de Santa Fe y en la Policía lo recuerdan por haber baleado a un comisario en 2005.
Cuando se lo detuvo, llevaba algo más de un kilo de pasta base para preparar cocaína, una pistola calibre 40 con 11 proyectiles con punta de teflón capaces de atravesar chalecos antibalas, 13 mil pesos en efectivo y un bidón con acetona, elemento utilizado para la fabricación de la droga.
En una casa de calle América al 2100, en la localidad de Alvear, la policía se encontró con 100 gramos de pasta base, un litro de amoníaco, 15 litros de acetona. También otro tipo de precursores químicos que se utilizan para procesar la pasta base y obtener cocaína. También aparecieron otras sustancias que se utilizan en las denominadas “cocinas” para estirar la droga, y municiones de diferentes calibres, teléfonos celulares y una olla. En ese recipiente, según manifestaron los investigadores, los integrantes de la banda de Quevedo “cocinaban” la pasta base para convertirla en cocaína. Esa droga era después vendida en pequeñas dosis en la zona sur de Rosario.
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